Nos reproducimos, sometemos al resto de las especies del planeta y creemos que nos hemos adueñado del mundo.
No nos damos cuenta, de que somos hijos de la Tierra y que es ella, quien nos alimenta y nos permite vivir.
En el Primer mundo, nos creemos a salvo de las grandes catástrofes, pues pensamos que éstas sólo afectan a los países llamados del Tercer mundo.
Es cierto, que así ocurre en la mayoría de los casos. Pero no somos inmunes a las fuerzas de la naturaleza, ni por supuesto, a las consecuencias de nuestros propios errores o a la maldad de unos cuantos.
En este artículo, se relacionan los 10 desastres naturales más mortíferos, de los que se tiene noticia.
Terremotos, ciclones, tsunamis e inundaciones, son los los responsables de los mayores desastres naturales.
Éstos ocasionan miles de muertos por su acción directa, pero luego, las enfermedades, la falta de higiene y la escasez de alimentos, completan la tragedia.
Conscientes de ello, algunos exagerados, a los que apodo supervivencialistas, llevan la prevención individual y familiar, a un grado tragicómico, como puede verse en una de las fotografías.
Corresponde a los países y organismos internacionales, prevenir en lo posible, las catástrofes naturales y paliar los efectos colaterales de la misma.
Es preciso tener protocolos de actuación e infraestructuras nacionales y supranacionales, que permitan actuar con rapidez, coordinación y eficacia.
Pero no basta con ello, es preciso también, un equipo humano adecuadamente entrenado y coordinado.
Se expone a continuación, un breve resumen de lo que debe ser una asistencia de emergencia para la Seguridad del Abastecimiento Alimentario (SAA)
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