lunes, 6 de abril de 2020

¿Presidente de guerra o Pato cojo?

Hace años visité en Whashington, los monumentos a Lincoln y Tomas Jefferson; los memoriales de la I y II Guerra Mundial; de la Guerras de Corea y de Vietnam, así como el Cementerio de Arlington  

Tuve también la fortuna, de visitar los jardines de la Casa Blanca y de presenciar en directo debates y votaciones en el Senado norteamericano.

"Viajar es leer la vida" y en aquél viaje, aprendí mucho sobre la democracia americana, el patriotismo de su pueblo y el amor que siente por su bandera y su himno nacional.

También allí existe una intensa pugna entre el partido Republicano y el Demócrata, pero cuando está en riesgo la seguridad de la nación, todos los políticos apoyan sin fisuras al Presidente de los Estados Unidos, al que en estas circunstancias, denominan "Presidente de Guerra"

En otros tiempos, el partido socialista, practicó una dura oposición al Gobierno de España; por ejemplo, con ocasión del naufragio del Prestige, de la Guerra de Iraq, de los atentados de Atocha y de la epidemia del ébola, acusando de asesino al Presidente popular de turno, rodeando incluso las sedes del PP.

Sánchez accedió a la Presidencia del Gobierno, con el apoyo directo de partidos comunistas y explícito, de partidos violentos y golpistas. Desde entonces, ha cometido muchos errores, como el fomento de las manifestaciones feministas, del pasado 8 de marzo, cuando ya conocía la grave situación epidemiológica en nuestro país.

Recordar las mentiras, intrigas, demagogias y traiciones que Sánchez ha perpetrado, no genera sentimientos positivos. Pero mueren miles de compatriotas, nuestra economía sufre una grave crisis y España, está en guerra contra el Covid 19.

La nación está en peligro, hay un "Estado de Alerta" y debemos apoyar a nuestro  "Presidente de Guerra".

Sánchez ha exigido lealtad institucional a la oposición y ésta se la ha dado. Sin embargo, no ha correspondido con la misma lealtad desde la Moncloa:

* Progresa en su objetivo de indultar los condenados por el golpe de Estado en Cataluña.

* Ha forzado la normativa para facilitar la presencia de Iglesias en el CNI, con gran preocupación de la UE y la OTAN.

* Celebra ruedas de prensa con censura y gratifica a las empresas periodísticas con subvenciones.

* La oposición, no puede ejercer el derecho de réplica, a sus largas comparecencias televisivas.

* No reconoce los graves errores de su gobierno e intenta responsabilizar al PP de los más de 12000 muertos habidos hasta ahora.

* No ha apoyado institucionalmente al Rey en la campaña de desprestigio que han organizado los partidos que apoyaron su investidura y está por ver si apoyará el proyecto de ley para la despenalización del delito de injurias a la Corona y de ultrajes a España.

* Adopta importantes medidas económicas por la crisis del covid 19, sin el consenso previo con la oposición.

El Presidente Sánchez, con su artificial imagen kenediana, ha perdido gran parte de su popularidad; por la irresponsable promoción de las manifestaciones del 8 M y por no afrontar con eficacia la pandemia. También ha perdido credibilidad como "Presidente de Guerra", por no corresponder con la misma lealtad a la oposición. 

La desunión de su gobierno; su incapacidad para afrontar la crisis; las nefastas cesiones que hace a sus socios separatistas; la pérdida de peso y prestigio internacional del país y la grave situación económica, ponen de manifiesto la gran debilidad del Presidente.

Sánchez es ahora, la versión española del "Pato cojo". Así llaman a los Presidentes norteamericanos, cercanos al fin de su mandato político, cuando se ven sobrepasados por las circunstancias.

El Presidente debe dejar paso a un gobierno de concentración, que se enfrente con solvencia a esta enorme crisis o alternativamente, reedite unos serios Pactos de la Moncloa.

Manifestación feminista del 8 M que provocó
los contagios masivos del Covid 19

Monumento a Thomas Jeffereson
Monumento a Abrahán Lincoln
Senado de los Estados Unidos

Cementerio de Arlington
Tumba del imitado JF Kennedy
La Casa Blanca
Palacio de la Moncloa

Caricatura del "Pato Cojo"



Resolución sobre la tramitación de indultos
 Proposición de Ley, para despenalizar las 
injurias a la Corona y los ultrajes a España
 Modificación legal para permitir la
integración de Iglesias en el CNI






































viernes, 3 de abril de 2020

Viejos desechables

Hemos alcanzado una gran expectativa media de vida, gracias al progreso económico, los hábitos saludables y los avances de la Medicina. Este logro, ha puesto en riesgo nuestro sistema de pensiones y a los viejos, se nos considera ya una "carga social"

Décadas atrás, los de nuestra edad, eran unos viejos respetables y respetados, cercanos al "marmolillo final" y hoy,  somos física y mentalmente, más jóvenes e independientes.

Somos abuelos serenos, cómplices de nuestros nietos, a los que transmitimos paz, amor y sabiduría. Al mismo tiempo, nos cuidamos, viajamos por el mundo, soñamos y nos enamoramos. 

"Morimos cuando dejamos de soñar" 

Somos muchos los que aún soñamos y deseamos vivir plenamente muchos amaneceres

En esas estamos cuando un virus maldito, ha surgido de las entrañas de China, con ansias de muerte y lágrimas

Mientras, nuestros políticos, han estado a otras prioridades, han pecado de negligencia, imprevisión e inoperancia ante el "Covid 19" :

"Más mata el machismo que el coronavirus"

Con los servicios sanitarios colapsados y con escasez de EPIS y de camas en las UCIs, ha sido preciso aplicar un protocolo médico. El objetivo es alcanzar la mayor utilidad social durante una guerra sanitaria, cuyo dogma es la "Ética utilitaria" en una situación extrema de gestión de la catástrofe: 

"Máxima rentabilidad a la extrema limitación de los recursos disponibles" 

"Priorizar al que tenga posibilidad de vivir más años; no al que más lo necesite"

Es decir, que un paciente de 50 años sin patología grave, tendría prioridad de atención sobre otro de 75 en situación critica. Prima la expectativa de tiempo que pudiera vivir un paciente tras sanar.

Nuestros ángeles de bata blanca, salvan vidas, arriesgando las suyas; deben "jugar a dioses", decidiendo, quienes vivirán al amanecer y consuelan los enfermos terminales. Derrochan un desgaste físico y mental enorme, que les dejará traumas psicológicos a medio plazo. 

Por todo ello, el protocolo médico para realizar un "Triaje de guerra", establece que los enfermos sean clasificados por colores:  

                                                 Verde: leve y recuperable
                                                Amarillo: menos grave y recuperable
                                                Rojo: en estado crítico de actuación urgente
                                                Gris: ancianos; atención en último lugar, si hay tiempo y recursos
                                                Negro: no recuperables; sedar y dejarles morir

Si bien las estadísticas cambian rápidamente, hay unas cifras indicativas que confirman el protocolo:

                           Rango de edad     Hospitalizados     Ingresados en UCI     Fallecidos

                            60 a 69 años               18,7%                        27%                         8,0%
                            70 a 79 años               24,6%                        35,8%                    20,9%
                             >80 años                    23,8%                         7,3%                     67,3%

"Vivir o morir, mientras  silban  las balas de  muerte, sobre nuestras sienes"

Los que nacimos durante la guerra civil o poco después, somos la generación que levantó un país destrozado, dio vida a nuestros jóvenes y les procuró un futuro mejor. Sin embargo, ahora somos  "viejos desechables"; nos aplican un protocolo de Ética utilitaria; nos "trían" en color negro o gris y nos roban el mañana.

No culpo a los ángeles de bata blanca, sino a quienes no han previsto a tiempo la pandemia, ni sabido gestionarla.

"Mis coetáneos, mueren y son enterrados solos" 

"Quedan los recuerdos, las cenizas, unas viejas fotos y la obligación moral de exigir justicia"