domingo, 21 de junio de 2020

Solsticio de verano

Sudor de siega; olor a hierba cortada; Vivaldi; sorbos de té; flores de magnolio; dama de noche aún sin aroma; azahar con promesas de otoño; tomateras trabajando el verano; lechugas para mis dientes; jilgueros y petirrojos volando sus colores; mirlos ansiando mis fresas; caracoles que pastan mi huerta; brisa bailando las hojas; árboles con mensajes de amor; mariposas, tijeretas, cochinillas, hormigas, arañas moscas y pulgones,... vida de campo; paz sin reservas; nietos que cambiarán mi estío; hijos que romperán mi rutina; sueños de un viejo; sonrisas de damas en mis sentimientos.

Copa de vino; confinados besos al aire; piel sin sentimientos; latidos solitarios. Miradas que no hablan; labios ayunos de pasión; soledades que se miran con la luna; espera que desespera; miedos de virus.

Verano naciente; olas que van pero vuelven; pies en la arena; espumas salinas; gaviotas dibujando el cielo y veleros en el horizonte.

Recuerdos de Sevilla; presente incierto; sueños de futuro; música que eleva; niños de ternura yancianos en su invierno.

Es verano. Es España doliente por sus muertos en soledad y por los felones que traicionan la sangre de nuestros héroes