domingo, 10 de julio de 2016

Fe y corazón

Mucha filmografía es auténtica basura. Hay sin embargo otras que además aportan historia, aventura, amor y valores humanos.

He visto la película "Un horizonte muy lejano", de Tom Cruise y Nicole Kidman, que representa muy bien la conquista del sueño americano y explica el carácter de una gran nación.

Los Estados Unidos de América, se formaron con hombres y mujeres que procedentes de la vieja Europa, llegaron por el este y alcanzaron la costa oeste formando un gran país.

Luego llegaron los asiáticos por el oeste y sucesivas oleadas de inmigrantes de Europa, regaron aquellas tierras con su sangre y sudor.

Debo citar también la negra historia de la esclavitud africana y todo el sufrimiento que generó.

Dolor, llantos, polvo y barro, pero finalmente, una nación en un mundo libre que les llevó a liderar el planeta.

Eran parias de la tierra, aventureros, ex convictos, soñadores, muertos de hambre,...pero la inmensa mayoría de ellos, tenían fe y corazón.

Forjaron un país en un gran reto, lucharon ante la adversidad y llegaron al sueño americano. Atrás quedaron las viejas rencillas de sus orígenes, las persecuciones religiosas, las deudas pendientes y las raíces que les ataban a los prejuicios.

Los norteamericanos aprendieron a pensar y sentir como norteamericanos, a creer en sí mismos y a merecer su destino con su creatividad, esfuerzo y determinación.

De aquellos pioneros surgió el pueblo actual, un crisol de razas y culturas que ama su bandera y da su sangre por ella. Que liga su futuro al trabajo y cree en el mérito y la libertad, como razón de progreso, al contrario de los europeos, que alejados de ese carácter pionero, parecemos tener miedo al futuro y vivimos pendiente de la subvención del papá estado.

Jhon Fitzeral Kennedy, levantó la bandera de Norteamérica y dijo: "No preguntes qué puede hacer América por ti, sino qué puedes hacer tú por América"

En España, prima una educación sin esfuerzo ni excelencia, se aspira fundamentalmente a trabajar por cuenta ajena, se exige vivienda porque lo recoge la Constitución, proliferan los ocupas y el proteccionismo no estimula el riesgo y la creatividad.

Los partidos políticos, los artistas, los sindicatos, las asociaciones empresariales,...cobran subvenciones, sin arriesgarse a vivir de sus afiliados o depender de la creatividad, la excelencia y de la capacidad de conquistar su triunfo

En Europa y en particular España, se vive en la mediocridad, el conformismo y el miedo a la libertad.

Hace falta mucha fe y mucho corazón, para luchar por un sueño.

Nota: en mis viajes por otros países, he aprendido lo bueno que tenemos en España por conservar y lo mucho que tenemos que aprender de los demás. Yo mismo, como persona, me considero con los mismos defectos y las mismas virtudes que tienen mis compatriotas. Mis propios defectos no deben ser una excusa, No me vale tampoco, justificar nuestros defectos criticando los numerosos fallos de los norteamericanos. Se trata de ser mejores y de dejar a nuestros hijos una casa con las ventanas abiertas al oxígeno y a la libertad, para que como aquellos pioneros que hicieron un gran país, persigan su sueño seguros de sí mismos, con fe y corazón.

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