Nos encontramos en la zona oriental de la isla de Java. Esta vez, nuestra próxima aventura, será ascender el monte Bromo.
Se trata de un volcán activo (su última erupción fue en el año 2016) que forma parte del macizo del Tegger. Su cima está a 2,329 metros y su prominencia es de 586 metros.
Los tres picos más conocidos del Parque Nacional Bromo Tegger Semeru son: El Semeru, el Bromo y el Batok. El Bromo no es el más alto, pero es quizás el más hermoso
Fuimos en furgoneta hasta Cemoro Lawang y allí cambiamos a un todo terreno hasta el desierto de arena ya próximo al volcán.
Alquilé un caballo para acercarme hasta el punto de ataque del volcán. Por comodidad, pero sobretodo, por el placer de montar nuevamente. Era pequeño, pero muy brioso y además estaba entero.
Ya en la base de la prominencia, comencé la subida de los 200 últimos peldaños. Eran muy altos e irregulares. Por algún motivo, las escaleras de Indonesia son así.
Fue un buen esfuerzo, pero mereció la pena. El paisaje exterior era magnífico y el interior, era además sobrecogedor.
La pendiente interna del cráter era muy pronunciada y conducía a una caldera de la que salían gases sulfurosos cada pocos segundos.
Sus paredes, teñidas de azufre, parecían de oro.pero su color llamaba a muerte..
Los indonesios son muy proclives a las ofrendas; especialmente, los hinduístas. Subían animales para sacrificarlos a sus deidades, rezaban en el borde mismo del cráter y lanzaban flores al vientre de fuego.
Nuevamente, por seguir los ritos del país, compré un precioso ramillete de flores y lo lancé con toda mi fuerza al interior del volcán.
Pedí un deseo, pero sabiendo que este se consigue sólo con la determinación de luchar por él.
Una mujer recogió las ofrendas hechas a los dioses por los hinduístas.
Otros más inconscientes, arriesgaban gravemente sus vidas bajando por la pendiente del cráter. Buscaban los ramos de flores para revenderlos y las monedas que tiran los visitantes en busca de un deseo.
Se trata de un volcán activo (su última erupción fue en el año 2016) que forma parte del macizo del Tegger. Su cima está a 2,329 metros y su prominencia es de 586 metros.
Los tres picos más conocidos del Parque Nacional Bromo Tegger Semeru son: El Semeru, el Bromo y el Batok. El Bromo no es el más alto, pero es quizás el más hermoso
Fuimos en furgoneta hasta Cemoro Lawang y allí cambiamos a un todo terreno hasta el desierto de arena ya próximo al volcán.
Alquilé un caballo para acercarme hasta el punto de ataque del volcán. Por comodidad, pero sobretodo, por el placer de montar nuevamente. Era pequeño, pero muy brioso y además estaba entero.
Ya en la base de la prominencia, comencé la subida de los 200 últimos peldaños. Eran muy altos e irregulares. Por algún motivo, las escaleras de Indonesia son así.
Fue un buen esfuerzo, pero mereció la pena. El paisaje exterior era magnífico y el interior, era además sobrecogedor.
La pendiente interna del cráter era muy pronunciada y conducía a una caldera de la que salían gases sulfurosos cada pocos segundos.
Sus paredes, teñidas de azufre, parecían de oro.pero su color llamaba a muerte..
Los indonesios son muy proclives a las ofrendas; especialmente, los hinduístas. Subían animales para sacrificarlos a sus deidades, rezaban en el borde mismo del cráter y lanzaban flores al vientre de fuego.
Nuevamente, por seguir los ritos del país, compré un precioso ramillete de flores y lo lancé con toda mi fuerza al interior del volcán.
Pedí un deseo, pero sabiendo que este se consigue sólo con la determinación de luchar por él.
Una mujer recogió las ofrendas hechas a los dioses por los hinduístas.
Otros más inconscientes, arriesgaban gravemente sus vidas bajando por la pendiente del cráter. Buscaban los ramos de flores para revenderlos y las monedas que tiran los visitantes en busca de un deseo.
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